Acratador 5 de enero de 2012
Motivos para enfadarse sobran, empezando el año 2012 con una reforma laboral en ciermes, con recortes en lo social, pero también con respuestas organizadas en la calle, aquí y allá. También son tiempos de recordar que el nuevo gobierno está regalando por un lado dinero a la Iglesia a espuertas y por otro a las grandes eléctricas con su propuesta de mantener abiertas las nucleares. Pero no faltamos a la cita contrainformativa, contando aquello que a algunos escuece. Feliz 2012