Clarence Williams (y un botijo)

Después de los blancurrinos de la semana pasada, ahora tocaba escuchar un algo de lo que fueron posteriormente registrando los padres y las madres del cordero. Esta noche nos centramos en la música de uno de los primerisísimos afroamericanos en despachar rodajitas de pizarra. El genial compositor, pianista, arreglista, mánager, cantante, bailarín, director de tropecientas bandas y, sí, tocador de botijos: el sin par Clarence Williams. Y lo acompañarán una buena cuadrilla de colegas, esos primerisísimos astros de esto de la musiqueta jazz. Vale que puede parecer un melón con gafapastas pero su música resultó definitivamente esencial e influyente. Mil hurras para el amigo Clarencio y su botijo!

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