Wayne Shorter a mediados de los años 60

Wayne Shorter estaba que se salía, oigan. Después de una buena temporada curtiéndose con los Jazz Messengers, dándole al saxo tenor y aportando sus primeras composiciones, abandona la formación del bueno de Art Blakey (ojo con la novedad que les anunciamos!!!) y se enrola en el siguiente gran quinteto del fenomenal Miles Davis. Todo esto en 1964, donde también comienza una fantabulosa discografía como líder para el sello Blue Note. Partimos de esas fechas para dar un pequeño repaso del trabajo que fue realizando con unos y otros y, muy especialmente, a esos primeros discos de la nota azul. Mucha y muy buena música creada en muy poco tiempo por un genio en ebullición. Disfrutaremos de un buen puñado de superclásicos y de un sonido y unas composiciones muy características de toda una época. Jazz impresionista e impresionante. Y muy intrigante, ya verán. Atmósferas oníricas, mágicas y misteriosas. Temas protagonizados por brujas, demonios, fantasmas, cadáveres danzantes, pesadillas y fábulas infantiles con habichuelas gigantes y mágicas… y otras cosas que hacen yu yu. Speak no Evil!

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